¿Qué entendemos por autonomía?
La
independencia y la confianza en sí mismo que un niño/a posee y que lo hace actuar de manera segura y
responsable ante las diferentes situaciones de la vida.
Tener
sentido de autonomía no significa que el niño tenga que hacer solo lo que le
gusta o lo que le apetezca en el hogar… la toma de las decisiones debe ser de
los padres ya que ellos, son sus guías porque la autonomía no significa
permisividad.
El sentimiento de autonomía es que el
niño debe sentirse capaz de explorar de forma libre dentro de unos límites de
seguridad establecidos por los padres.
El
niño que tiene la libertad y oportunidad de manipular y usar su mano en una
forma lógica, con consecuencias y usando elementos reales, desarrolla una
fuerte personalidad (María Montessori).
¿Cómo
podemos fomentar la autonomía?
-Darle
responsabilidades según su edad
madurativa.
-Evitar
hacer todo por ellos.
- Dar seguridad al niño a través del establecimiento de límites y normas.
-Apoyar
sus logros.
-Valorar
su esfuerzo.
- Ser comunicativos. Hablar con los niños desde el respeto
y la empatía es fundamental para enseñarles a ser autónomos.